Sweet Garden

Sweet Garden es un juego casual en el que tendremos que cuidar de una planta como si de una mascota virtual se tratase (aunque con un nivel de demanda de atención bastante inferior). Nuestro objetivo será hacerla crecer para que, a cambio, nos dé monedas con las que comprarle cosas.

El sistema de juego de Sweet Garden es bien sencillo: cada cierto tiempo, nuestra amiga planta necesitará que se la riegue, que se corten los hierbajos que crecen a su alrededor o que se utilicen pesticidas con los que eliminar las plagas. A cambio, durante la noche, generará dinero con el que podremos comprar utensilios de jardinería con los que llevar a cabo nuestros cuidados.

En la parte inferior de la pantalla, encontraremos una cartilla en la que nos vienen indicados los niveles de agua, luz o felicidad que tiene nuestra planta. La idea es mantenerlos todos tan altos como sea posible para que la planta vaya creciendo fuerte y sana. El único problema: que los cambios que experimenta la planta son tan lentos que a penas podremos jugar realmente.

Sweet Garden es un videojuego con una premisa bonita pero que no termina de resultar especialmente entretenido a causa de la falta de jugabilidad que tiene, aunque sí que se mantiene fiel a los ritmos vitales de las plantas, lo que le da un toque original y único que puede resultar interesante.